Perspectiva: arriba

En la última entrada vimos cómo entrenar el ojo haciéndonos mirar fuera del ángulo natural, buscando nuevos puntos de vista. En aquella ocasión nos forzábamos a mirar hacia abajo (Perspectiva: abajo). Hoy miraremos hacia arriba.

Dirigiremos nuestros ojos a las alturas, donde no solemos mirar, en busca de edificios, tejados, cielos, cualquier cosa que nos resulte interesante. La única regla es apuntar con la cámara hacia arriba.

Y esto es lo que se ha traído David a casa en su tarjeta:

IMGP5930IMGP5931IMGP5933IMGP5948IMGP5839IMGP5883IMGP5886IMGP5889IMGP5890IMGP5902IMGP5903IMGP5905IMGP5910IMGP5912

No está mal, ¿no?

Siguen siendo fotos de un pitufo de 10 años, con una cámara compacta, configurada en modo automático. Sin procesado.

Perspectiva: abajo

Cuando vamos paseando nuestros ojos se van de forma natural a los objetos que quedan a su misma altura. Si pensáis que los productos en los estantes del supermercado están colocados al azar estáis muy equivocados. A la altura de nuestros ojos, donde mejor los vemos, estarán los productos que quieren que te lleves a casa.

Pero un fotógrafo no puede conformarse con eso. Tiene que saber mirar hacia otros sitios. Descubrir cosas interesantes en otros ángulos.

Para las dos próximas entradas le he propuesto a David que se olvide de lo fácil y busque en sitios donde normalmente no prestamos atención: a ras de suelo y en las alturas. Vamos a intentar entrenar ese ojo de fotógrafo.

El objetivo hoy era mirar al suelo. La cámara debía apuntar hacia abajo siempre. Buscamos objetos, texturas, colores, cualquier cosa que nos llame la atención, y que si no la buscáramos pasaría probablemente desapercibida.

Y esta es la cosecha de hoy:

IMGP5919IMGP5920IMGP5940IMGP5943IMGP5834IMGP5849IMGP5856IMGP5862IMGP5867IMGP5869IMGP5870IMGP5872IMGP5873IMGP5875

Para la siguiente miraremos hacia arriba. No os la perdáis.